Soto del Real, 2 de octubre de 2020

 

Buenos días a todos los que formamos la Comunidad Educativa de Salesianos el Pilar. Hoy estamos de enhorabuena. Nuestro colegio cumple 40 años. Es una fecha significativa y entrañable. Hace un año cuando llegué me dijeron: ¡El año que viene es el aniversario del colegio!

¿Habrá que hacer algo? Ya teníamos pensadas algunas iniciativas y en  los presupuestos habíamos reservado una partida. Dadas las circunstancias de la pandemia, nuestras previsiones se nos han caído y hay que actualizar y buscar nuevas fechas. Nos gustaría hacer algo digno en Don Bosco, 31 de enero, Dios mediante.

«La idea de construir un Colegio en la localidad de Soto del Real, se debe a la iniciativa de Dña. Pilar González Turógano (de ahí el nombre Colegio El Pilar), que siempre intuyó la necesidad de un centro de enseñanza para el pueblo donde residía, y también para poder beneficiar a los pueblos de los alrededores. Al compartir esta inquietud con su hijo D. Casimiro Morcillo, Arzobispo de Madrid, y primer obispo de Bilbao, éste la hizo suya, y en el año 1968, al fallecer Dña. Pilar, concreta la idea junto con su hermana M.Margarita Morcillo». (Documentación histórica). 

Tenemos que agradecer a todas las personas que han hecho posible, que este sueño se haya hecho realidad: la familia de D. Casimiro Morcillo y su hermana sor Margarita Morcillo, a la congregación de los Ángeles Custodios, cuya fiesta celebramos hoy, a tantos educadores/as que estuvieron en los inicios de la Obra. Agradecer a los primeros salesianos que tomaron el relevo a las religiosas. A todos los educadores que han hecho de este colegio algo grande aquí en Soto y en los pueblos de los alrededores. A las personas que les tocó ampliar las instalaciones y dejar el colegio como lo conocemos hoy día. A todas las familias que han confiado en la educación de sus hijos en este colegio. A todos los alumnos/as que se han formado a lo largo de estos años y guardan buenos recuerdos de los tiempos pasados, de las amistades forjadas; muchos de ellos hoy también quieren que sus hijos se eduquen en los valores del humanismo cristiano. A todos los que en la actualidad participáis de esta bella historia del Pilar: profesores, educadores, animadores del Centro Juvenil, entrenadores deportivos, Asociación de Cooperadores y de Gracias a la Congregación Salesiana que ha confiado en esta obra y su estancia permanente entre la juventud del Pilar. Tenemos un recuerdo muy especial y cariñoso por las personas que han fallecido en estos 40 años de historia: los fundadores, religiosas y salesianos, a tantos educadores, familias y alumnos que han colaborado en esta misión educativa-pastoral y han hecho grande la Obra. Hoy nuestro recuerdo cariñoso y oración entrañable por nuestro querido Juanma.

No existe modernidad, sin una buena tradición. Queremos continuar nuestra misión entre los jóvenes, adaptándonos a sus necesidades y con la intención de sacar lo mejor de ellos mismos. Como Don Bosco nos inculcó y del que somos sus herederos, utilizando el Sistema Preventivo y haciendo de Salesianos el Pilar: Casa que acoge, escuela que enseña y prepara para la vida, Patio donde establecer relaciones duraderas y Parroquia que evangeliza. Nos gustaría que el binomio «Honrados ciudadanos y buenos cristianos», que Don Bosco quería para sus casas, fuera una realidad entre la juventud de nuestro colegio. Tenemos una buena tradición, unos buenos cimientos sobre los que seguir construyendo y mejorando lo que ya tenemos.

Pidamos a nuestra madre María Auxiliadora que siga bendiciéndonos y que esta obra siga adelante otros tantos años más. De nosotros dependerá. Por supuesto, trabajo e ilusión no nos faltan. Pongamos lo mejor de nosotros mismos, nuestras cualidades y proyectos en marcha, es nuestro reto.

¡Algo nuevo está brotando, no lo notáis!

Un afectuoso saludo

Iñaki